1ª vuelta al mundo [Día 13] En Lima, los dos se separan
Hoy separados por el estado de ánimo
Decidimos separarnos hoy debido a nuestros estados de ánimo. Salgo del hotel y deambulo por los alrededores. Hay algo peligroso en esta ciudad, así que me meto el mínimo dinero en el bolsillo, sin teléfono ni cámara digital. La calle comercial aún no está abierta, y hay persianas o barras de hierro. El hecho de que las persianas sean de hierro también demuestra lo insegura que es.
Luego había una oficina de cambio de divisas. El ambiente me pareció bastante cargado, pero había dos guardias de seguridad con rifles a la entrada y a la salida. ¿Tantos? ¿Y por la mañana?
Después, cuando estaba ocioso en la plaza, un joven se me acercó en inglés. ¿De dónde eres?” ¿Cómo te llamas? ¿Te gusta esta ciudad?”. Eran preguntas tontas. No sabía qué me haría si me limitaba a ignorarle, así que hablé con él, pero era demasiado problema para ir más lejos, así que volví al hotel.
Salida de sirenas
La sirena estaba recorriendo la ciudad en un autobús lupuloso con una pareja que conoció por el camino (su marido es abogado).
Niño bailando en un paso de peatones mientras espera en un semáforo
Una sirena me contó una historia de recuerdo: ‘¡Fue increíble! y de lo que se trataba era de dos chicos que bailaban delante de una fila de coches que esperaban en los semáforos para ganarse las propinas, lo cual era realmente genial. Eran tan fuertes que no necesitaban la ayuda de nadie y se las ganaban con su propio ingenio. Me encantan este tipo de cosas.
Un anciano se tira por un precipicio para ganar propinas
Se decía que la gente se lanzaba desde un precipicio. Decía que asumía los pecados de la gente y los expiaba zambulléndose. Sin embargo, después de esto, el anciano fue retransmitido por televisión y se descubrió que simplemente estaba ganando propinas buceando, ¡lo que provocó muchas risas! Sale del agua y corre lo más rápido que puede hacia los espectadores, pero para entonces todo el mundo ya se ha dispersado y el anciano se ve inevitablemente mendigando una propina.
Creo que por la noche salimos por la ciudad, pero no debió de ser para tanto porque sólo tengo estas fotos. No tengo ningún recuerdo ni registro de ello.